Cuando seguimos a un artista al que admiramos, casi siempre admiramos también su forma de ser, de vestir y de actuar. En otras palabras, cuando hablamos de nuestros artistas favoritos, no sólo nos sentimos atraídos por su música, sino por también por el resto de componentes que conforman la imagen de dicho artista.
Benito
Cuando pensamos en Bad Bunny, por ejemplo, vemos a un tipo inteligente a quien lo que opinen sus críticos, poco le importa. No es casual que llamara a su disco de 2020: “YHLQMDLG” (Yo hago lo que me da la gana).
En su música, su manera de vestir, sus uñas y su actitud general, Benito parece haber encontrado la manera de mantener los pies sobre la tierra y al mismo tiempo de no verse afectado por los haters de las redes sociales, la prensa o el público en general. Esa actitud despreocupada es uno de los grandes ‘imanes’ que atraen a su enorme masa de fans.
Nathy
La personalidad de Nathy Peluso, ayuda a que no sólo escuchemos su música, sino que también la sintamos. Si algunas vez has visto un show de ella en vivo, ya sea en persona o por YouTube, notarás que (como le comentamos en nuestra reciente charla con ella), pareciera ser esa típica niña pequeña que solemos ver en bodas o cumpleaños, que sin la menor inhibición, se pone a bailar solita en la pista de baile, entre una multitud de adultos.
El Negrito de Los Ojos Claros
Si visitamos la personalidad de Ozuna, posiblemente la primera palabra que nos venga a la mente sea ‘familia’. El reggaetonero, que ha mantenido la misma relación con su esposa desde antes de ser famoso, ha sabido adaptarse a su vida de fama y abundancia económica, sin perder el foco en lo que realmente importa.
René
Residente, por su parte, ha dejado en claro que su boca no tiene filtros. (Algo que J Balvin comprobó recientemente en carne propia). Su imagen está construida sobre la idea de que, nos guste o no y se equivoque o no, el boricua nos dirá lo que piense de nosotros, sin anestesia y en nuestra propia cara.
Ya sea a través de su música o sus redes sociales, quien siga al rapero sabe que el Residente que actúa en tarima y el René que vemos en sus posts y videos personales, son realmente la misma persona.
Nicky
En el caso de Nicky Jam, el atractivo además de su música, tiene que ver con una imagen de superación, de darnos a entender que aunque estemos tocando fondo, los milagros existen, y que si verdaderamente nos lo proponemos, podremos hacer realidad nuestros sueños.
No es lo mismo leer esas frases de superación personal en una tarjeta de Hallmark o un meme de internet, que seguir a alguien de carne y hueso como él, y encontrar inspiración en una historia real y tangible como la suya.
Karol
Karol tiene una actitud al cantar, que nos hace sentir como si estuviéramos viendo actuar a una amiga o una hermana. Las conexión que la sudamericana crea con nosotros, su público, hace que en lugar de verla como una celebridad inalcanzable, sintamos como que la conocemos de toda la vida y que luego del concierto nos encontraremos con ella a tomar una cervecita o un rico café colombiano.
Malu
Maluma tan sólo necesita mirarse en el espejo para saber que su mejor arma (además de su talento musical) es su look. El colombiano sabe que de feo no tiene nada y ha sabido utilizar esa ventaja desde el día uno. Al fin y al cabo, no cualquiera se atreve a apodarse a sí mismo: “el pretty boy”.
Su atractivo físico ha sido la ‘carnada’ para atraer la atención de la prensa, las marcas de ropa más exclusivas, y por supuesto las chicas, que fueron la ‘punta de lanza’ que posteriormente atrajo al resto de la masa de público que hoy lo sigue.
En Conclusión
Si miras con atención, encontrarás que todos y cada uno de los músicos que oyes a diario, poseen una imagen o forma de actuar que se ve representada en su música y que es parte del atractivo que te lleva a escucharlos y/o seguirlos en sus redes.
Quién sabe, tal vez nos vemos reflejados en ellos porque hacen, dicen o cantan lo que nosotros pensamos, pero no sabemos o no nos atrevemos a expresar. O quizás nos gustaría teñirnos el pelo de un color extraño, o usar ropa alocada y pintarnos la uñas, pero el entorno en el que nos movemos, no nos los permite.
Sea lo que sea, nuestra relación con los artistas va más allá de su música y requiere cierta química mutua para establecer una relación de ‘amistad’ con ellos, aún cuando jamás… los conozcamos en persona.
