Un Marciano Camino a Las Estrellas

Marciano Cantero, fue la voz de más de una generación de fans que, a lo largo y ancho de Iberoamérica, cantó y bailó cada uno de los éxitos de Los Enanitos Verdes, banda de la que fue líder desde principios de los 80.

Los Enanitos Verdes se destacaron por temas como: “La muralla verde”, “Simulacro de tensión”, “Te vi en un tren”, “Por el resto”, “Amigos”, “Igual que ayer” y “Lamento boliviano”, entre muchos otros éxitos. Podría decirse que no hay celebración latina en la que suene “Lamento Boliviano”, en el que sobrios, o borrachos y locos, no salgamos a corear ese famoso verso que comienza con… “Y yo estoy aquí…”

Junto a bandas como Soda Estéreo, Virus y Zas, dieron comienzo a una enorme ola de pop/rock argentino de exportación, que mucho antes del internet y las redes sociales, inundó todo Latinoamérica, casi de la misma manera que hoy lo hace la música urbana.

Provenientes de la provincia de Mendoza, sus integrantes hablan un español un tanto más neutro al que los argentinos nos tienen acostumbrados, lo que, de alguna manera, quizás ayudó a que, en entrevistas y conciertos, lograran un acercamiento aún mayor, con el público latino. Tal es así que de a momentos, llegaron a ser más exitosos fuera de la Argentina, que dentro.

Estamos hablando de 40 años de música, que aún hoy en día, mantiene casi 9 millones de oyentes mensuales, tan solo en Spotify. Esto es algo que no muchas bandas de pop/rock pueden decir, y que, como suele suceder, seguramente aumentará exponencialmente con su fallecimiento.

El cantante y bajista, había sido internado de urgencia por una infección renal y se encontraba en terapia intensiva, en una clínica privada de su provincia natal. Si bien los primeros reportes habrían indicado que se encontraba en recuperación, la realidad terminó siendo otra mucho más dura que, desde luego, tomó por sorpresa a sus fans.

En los últimos años, se nos fueron Gustavo Cerati, Pau Donés, Luis Alberto Spinetta y varios otros. Solo nos queda por decir… ¡Qué buena banda se debe estar armando en el cielo!

Gracias Marciano; gracias Enanitos, por regalarnos cuatro décadas de música, que durará para siempre.

¡Larga vida al Rocanrol!.

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *