¿País latino con mayor crecimiento musical?

Por Gonzalo Noales

Explorando el panorama latino, nos adentramos en un fenómeno que ha transformado las dinámicas de la industria. Mientras ciertos países han sido protagonistas indiscutibles, hay uno que emerge como el epicentro del crecimiento musical.

No es Puerto Rico

Desde el auge de la música urbana, Puerto Rico ha dominado la industria musical casi por completo. Aunque en algunos momentos Colombia logró seguirlos de cerca, el reinado de la pequeña isla caribeña nunca se vio realmente amenazado. De hecho, podríamos decir que el trono tiene la bandera boricua grabada para siempre, ya que fueron ellos quienes crearon la fórmula ganadora.

No es México

En los últimos años, hemos visto a la música regional mexicana establecerse firmemente en la industria y avanzar con paso seguro. Sin embargo, y aunque su crecimiento es innegable, sería injusto colocarlos en el primer puesto de los países con mayor crecimiento, ya que como sugiere su nombre, se trata de música regional —mexicana— y, por lo tanto, resulta obvio que sean ellos quienes obtengan el mayor beneficio.

Es Argentina

Así es, el país sudamericano fue dueño indiscutible del rock en nuestro idioma durante muchas décadas, siendo pioneros en la creación e internacionalización de este género. Sin embargo, con la llegada de la música urbana, al igual que en muchos otros países, el rock perdió gran parte de su popularidad.

Como resultado, Argentina dejó de exportar música y artistas durante muchos años, centrándose en crear y sonar dentro de sus fronteras. No obstante, con el surgimiento de nuevas generaciones influenciadas por el hip-hop y el rap anglosajón, sumado al éxito de la música urbana en español, comenzó a expandir sus horizontes.

Provenientes de las batallas de rap del Quinto Escalón en la década de 2010, artistas como Duki, Trueno, Lit Killah y Paco Amoroso no solo conquistaron una audiencia, sino que también dieron forma a una próspera escena. Al mismo tiempo, productores como Bizarrap y Federico Lauría crearon plataformas para que estos artistas encontraran canales de promoción a través de colaboraciones. En 2018, Lauría fundó Dale Play Récords, generando un giro de 360 grados en la escena musical argentina.

Desde entonces, el país del sur ha sido el mayor semillero de artistas nuevos exitosos que, dentro del género urbano y pop-urbano, han logrado imprimir su propio sello de autenticidad en lo que hacen.

Además de los mencionados anteriormente, artistas femeninas como Nicki Nicole, Nathy Peluso, María Becerra, Tini y Emilia, han roto viejas ataduras machistas y se han asociado a sus pares masculinos como Tiago Pzk, Paulo Londra, Khea y más recientemente, MIlo J, logrando reinventar el panorama musical latino, no solo en Latinoamérica sino también en los Estados Unidos.

Según un estudio realizado por Chartmetric, el top 10 de artistas argentinos pertenece al género Latino/urbano, alcanzando una audiencia internacional que oscila entre los 16 y los 25 millones de oyentes mensuales en Spotify, posicionándose en el top 500 de artistas globales.

¿Cómo lo lograron?

Una clave fundamental ha sido la asociación y colaboración orgánica con sus colegas. ¿Por qué la llamamos orgánica? Porque cualquiera que siga a estos artistas habrá notado que, en la mayoría de los casos, los une una verdadera relación de amistad, y que sus colaboraciones son mucho más que simples acuerdos comerciales.

Claro que nada de esto es casual; la química se tiene o no se tiene y no puede ser forzada. En el caso de ellos, podemos atestiguar que la tienen y de sobra.

La incógnita que queda en el aire es si podrán prolongar y sostener esta energía positiva con las nuevas generaciones de colegas, lo cual está aún por verse, pero mientras tanto, todo pareciera indicar, que no hay nada que los detenga.

LaMusica Reviews: ‘111’ de Milo J

Aunque nuestra música haya experimentado un crecimiento significativo en los últimos años, atravesamos un largo periodo en el que parecía difícil escapar de una clara monotonía musical. Un sonido que si bien contribuía a que nuestros artistas alcanzaran reconocimiento global, también dejaba en segundo plano a muchos otros géneros en los que también hemos sabido brillar.

Por eso, independientemente de que te guste o no el auge de la música mexicana en este 2023, sería ignorante no reconocer que sonidos como el de Peso Pluma o Grupo Frontera han sido en parte responsables de sacarnos de ese ‘loop’, dando paso a nuevas músicas que han logrado refrescar gran parte de lo que se escucha actualmente.

Es precisamente aquí donde entra Milo J, un joven de tan solo 17 años a quien presentamos meses atrás en nuestra sección de LaMusica Recomienda, y que ahora se ha convertido en la gran promesa que anticipamos.

Después de sorprendernos junto a Bizarrap con ‘En dormir sin Madrid’, un EP de 5 temas que, si aún no has escuchado, te recomendamos con urgencia, Milo no esperó más que 30 días para revelar otra carta que tenía guardada bajo la manga: su disco ‘111’.

Hablemos primero de la voz de Milo, que, lejos de sonar como la de un adolescente, parece la de un marinero irlandés, de esos que desayunan con whisky y un cigarro, pero con la sensibilidad de un alma vieja que parece haber vivido mucho más que los 17 octubres de este joven argentino.

En lo que respecta a la música, su disco comienza (y se mantiene) con la increíble audacia de no contar con una sola pista rítmica. Esta decisión, en un mundo tan dominado por el reguetón como el de hoy, podría parecer un acto arriesgado, pero funciona a la perfección.

Con la presencia de músicos invitados como el mencionado Peso Pluma, la también mexicana Yahritza de Yahritza y su Esencia, y sus compatriotas Yami Safdie y Nicki Nicole, Milo presenta 9 temas casi hipnóticos, acompañados por sus respectivos y muy cinematográficos videos.

Canciones como ‘M.A.I.’, ‘Alumbre’ y ‘Deseo Perder’ son algunas de nuestras favoritas, aunque en nuestra opinión, este es un disco para escuchar de principio a fin y no de manera aleatoria.

Un álbum 100% refrescante que coloca a Milo en la categoría de promesa absoluta de la buena música latina y que recibimos con los brazos abiertos.

¿Quién es Milo J, de la sesión #57 de Bizarrap?

Su verdadero nombre es Camilo Joaquín Villarruel, tiene tan solo 16 años y acaba de grabar la sesión #57 con Bizarrap.

Es una de las promesas más grandes de la escena urbana argentina. Su idea original era utilizar ‘Camilo’ como nombre artístico, pero debió conformarse con las últimas cuatro letras de ese nombre, porque, obviamente, ya había un colombiano ‘más o menos famoso’ que lo estaba utilizando desde antes.

Milo tiene una de esas voces inconfundibles que funcionan casi como un documento de identidad. Cualquiera que haya relacionado su registro vocal con su nombre, podrá reconocerlo con tan solo escuchar un par de sílabas de alguna de sus canciones.

Proveniente del barrio de Morón, provincia de Buenos Aires, comenzó, como tantos otros, a subir música a su canal de YouTube. 

Su primera canción, con un dejo de corrido tumbado y titulada ‘Tus Vueltas’, sirvió de ‘semilla musical’ que poco a poco comenzó a dar sus primeros brotes.

Luego vendrían temas como ‘Cuando estás vos’, ‘Tu paz’, ‘Domingo’ y ‘Morocha’; con este último su nombre comenzó a establecerse en la escena, pero no sería sino hasta el lanzamiento de ‘Milagrosa’ que el músico lograría ubicarse en el radar de sus compatriotas Duki y Lit Killah.

Desde entonces, su cuenta de YouTube cuenta con más de 200 millones de reproducciones, e incluye su mega éxito ‘Rara vez’, que en colaboración con el productor Taiu, pone en evidencia la versatilidad de este músico para moverse entre diferentes géneros y estilos.

Lo más reciente del argentino lleva por nombre Rincón’, tema que ya supera los 30 millones de reproducciones en YouTube y participó en ‘Dispara’, tema que aparece en ‘Alma’, el nuevo disco de Nicki Nicole.

Un artista con un talento notable, cuyos logros parecieran ser tan solo la punta del iceberg de un futuro que está a punto de explotar.

Argentina: ¿El Nuevo Epicentro de la Música Urbana?

Dependiendo de la edad que tengas, tal vez no sepas que por varias décadas, la Argentina fue el mayor semillero de música de todo Iberoamérica. El rock y pop que se producía en el país sudamericano, dio lugar a bandas y solistas como Soda Stereo, Babasónicos, Fito Páez, Virus, Charly García, Luis Alberto Spinetta, Los Enanitos Verdes y muchos otros, que invadieron todos y cada uno de los países de habla hispana, al igual que hoy lo hacen Bad Bunny o Karol G.

El auge (y permanencia), de la música urbana, tomó a la Argentina un tanto por sorpresa, ante un público muy crítico, que no se resignaba a dejar ir a un género como el rock, que luego de tantos años de éxitos, se había enraizado en el orgullo y la cultura general de su pueblo.

Sin embargo, el gusto musical de las generaciones más jóvenes (literalmente), no tardaría en hacerse oír, con el nacimiento de competencias de freestyle, que poco a poco irían encontrando a nombres como Duki, Khea, Trueno, Paulo Londra o Wos, entre tantos otros.

Esos sólidos cimientos dieron lugar a que, futuros artistas como Nicki Nicole, Tiago Pzk, Bizarrap, María Becerra o , Emilia Tini, pudieran soñar con una carrera que no solo amaran, sino que además les diera de comer, un detalle no menor en un país con tantos problemas económicos.

De ahí en más, esa pequeña onda en el agua, continuó creciendo hasta convertirse en el verdadero tsunami musical que es hoy, ‘compitiendo’ de tú a tú con países como Puerto Rico o Colombia, que desde luego le llevaban varios años de ventaja.

Desde entonces, grandes exponentes como Bad Bunny, Residente, Ozuna, J Balvin, Nicky Jam y Anuel AA, entre muchos otros, han colaborado con artistas urbanos del país sudamericano.  

Ocurre que este flow argentino, no es tan solo urbano, sino que emplea características propias de la cumbia local, el rock y hasta algunos rasgos tangueros; y si bien no deja de basarse en aquel sonido nacido del Dance Hall jamaiquino y las posteriores adaptaciones provenientes de Panamá y Puerto Rico, la música urbana argentina mantiene una textura diferente, que de alguna manera la hace única y por ende enormemente atractiva para el resto del mundo.

A continuación te listamos algunos de los nombres que deberías tener en tu radar, como potenciales herederos del futuro musical iberoamericano:

Lil Cake – El Mercho

Milo J – Rara Vez

La Joaqui – Dos Besitos

Big One – En la Intimidad

Callejero Fino – Tu Turrito

Rei – Pechito Partido

Sponsor Dios – Cómo Chilla Ella

Dillom – Sauce

Nico Valdi – Noche De Party

BM – M.A (Mejores Amigos)

El Negro Tecla – Rompe