Karol G – La cena más cara de su vida

Este año, el tan esperado evento Met Gala contará con la presencia de nuestra querida Karol G. Sin embargo, a pesar de haber sido invitada, la colombiana deberá desembolsar el valor de un sueldo promedio anual de los Estados Unidos para poder asistir.

¿Dónde y cuándo?

Conocida como la noche más importante del año en el mundo de la moda, la cena se llevará a cabo el primer lunes de mayo en el Metropolitan Museum of Art. Este evento reúne a una multitud de celebridades que deslumbran con sus atuendos de diseñador y disfrutan de una exquisita comida.

En el pasado

Otros de los nuestros que han recibido esta deseada invitación son: Jennifer Lopez, La famosa cantante y actriz, ha sido una presencia recurrente en el Met Gala a lo largo de los años. La actriz mexicana Salma Hayek; la colombiana Sofía Vergara; la actriz, modelo y esposa del actor Ryan Gosling, Eva Mendes; la actriz de origen dominicano Zoe Saldaña; la española Rosalía y Bad Bunny, entre otros.

¿Quién paga el costo de los boletos para el Met Gala?

Los precios de los boletos son exorbitantes y aumentan cada año. Se reporta que este año cada entrada —incluyendo la de Karol—, tendrá un valor de 50,000 dólares, y si alguien desea adquirir una mesa completa, como para estar entre amigos, deberá desembolsar 300,000 dólares.

¿Cualquiera que pague puede ir?

No, los boletos para el Met Gala no están disponibles para el público en general, ya que el evento es exclusivamente por invitación. Anna Wintour es la encargada de la lista de invitados, manteniendo un control estricto sobre quiénes pueden asistir.

¿Y el costo de la ropa?

En cuanto a la vestimenta, los famosos colaboran directamente con diseñadores para crear sus looks, por lo que no tienen que pagar grandes sumas de dinero por vestidos de alta costura. Es una oportunidad única para lucir creaciones de renombrados diseñadores sin costo alguno.

All inclusive

Por último, es importante señalar que todos los asistentes al Met Gala, ya sean celebridades o donantes adinerados del museo, tienen el privilegio de caminar por la alfombra roja. Sin embargo, los menos conocidos suelen sentirse desplazados ante la atención centrada en las celebridades más destacadas.

En Resumen

El Met Gala promete ser una noche llena de glamour y estilo, donde Karol tendrá que pagar su entrada como cualquier otro asistente, mientras aquellos que estén interesados podrán verlo por TV por mucho menos dinero, en pantuflas y pijama, pizza de por medio, desde la comodidad de sus casas.

No está tan mal después de todo 😉

De Rockstars a padres de familia

Por Gonzalo Noales

De 2020 al día de hoy, hemos notado un gran cambio en la vida de muchos de los artistas que, como fans, hemos venido siguiendo, consumiendo su música y asistiendo a sus conciertos.

Nombres como: J Balvin, Camilo, Maluma, Christian Nodal, Cazzu, Natti Natasha y más recientemente Kali Uchis, pasaron de ser músicos ‘rebeldes’ o ‘rockstars’, a esposos, esposas y padres de familia.

El gran cambio

En el cambiante panorama de la industria musical, la transición hacia el matrimonio y la paternidad para los artistas, a menudo los lleva a alejarse de la imagen de juventud y rebeldía que antes los caracterizaba. La llegada de los hijos trae consigo un sentido elevado de responsabilidad que inevitablemente se filtra en su creatividad artística.

La reacción de los fans

Para muchos jóvenes, estos músicos dejan de representar un modelo aspiracional o un símbolo de identificación, lo que los lleva a buscar a artistas más jóvenes que reflejen sus propias experiencias y desafíos generacionales.

Los admiradores más jóvenes buscan ídolos con los que puedan relacionarse en un nivel más cercano, ya sea compartiendo intereses comunes, valores similares o simplemente admirando su juventud y energía. Estos nuevos ídolos se convierten en amores platónicos, figuras que encarnan los sueños y aspiraciones de una generación emergente.

El desafío

A medida que la brecha generacional se amplía, los artistas que ingresan al matrimonio y la paternidad enfrentan el desafío de mantener su relevancia y conexión con las audiencias más jóvenes. Algunos pueden optar por adaptar su imagen y sonido para atraer a este nuevo público, como es el caso de Shakira, mientras que otros pueden centrarse en cultivar una base de admiradores más maduros.

En última instancia, la carrera de un músico después del matrimonio y la paternidad, depende de su capacidad para navegar estas complejas dinámicas y encontrar un equilibrio entre la autenticidad personal y las demandas cambiantes de un mercado que nunca se detiene.

¿Estamos endiosando a los artistas?

Por Gonzalo Noales

En esta época, donde las redes sociales nos convierten a todos en influencers de la vida de los demás, surge la pregunta: ¿estamos elevando a los artistas a la categoría de semidioses? La avalancha de amor incondicional y la escasez de críticas podrían estar gestando una generación de “niños malcriados” en este extraño mundo del entretenimiento.

Esta semana Maluma publicó en sus redes el siguiente mensaje:

La respuesta

En respuesta a su pregunta, podría argumentarse que los encargados de tomar esa decisión son precisamente los propietarios de espacios privados como restaurantes, bares o discotecas, quienes tienen todo el derecho de establecer sus propias normas. Al fin y al cabo, sería poco probable que Malu nos permitiera ingresar al próximo baby shower de su hija, si alguno de nosotros apareciera con chanclas y malla ¿No crees?

Los artistas, ya sea tu cantante favorito, el actor que amas o el creador de contenido que te hace reír, son gente como nosotros, solo que con muchos más seguidores y cuentas bancarias con enorme cantidad de ceros.

Esto genera que muchas veces vivan en un mundo donde son tratados como reyes 24/7, volviéndose un tanto consentidos. Esa sobreprotección y el acostumbrarlos a escuchar un “sí” a todo lo que piden, puede llevar a que terminen por hacer o decir cosas impulsivas o a perder el contacto con la realidad, creyendo que están por encima del bien y el mal.

Otro ejemplo

Tan solo días atrás, vimos y escuchamos a Carín León en uno de sus conciertos, anunciar: “Se me antoja echarme un perico”, haciendo clara referencia al consumo de cocaína. ¿Está en su derecho de decir algo así? Por supuesto, pero casi podríamos apostar que su publicista y su disquera no opinan lo mismo, como no lo hizo la persona que escribió la siguiente publicación.

Por eso la reacción de quienes frenaron a Maluma en Medellín, merece cierto reconocimiento, ya que hay que tener las botas bien puestas para negarle el acceso a alguien como él, en su ciudad natal.

En conclusión

No se trata de dejar de ser fans, sino de mantener un equilibrio sano. En lugar de solo aplaudir como focas amaestradas, podemos contribuir al crecimiento de nuestros artistas preferidos, siendo fans con opinión. ¿Te gusta algo? Dale tu amor, pero también está bien expresar cuando algo no te cuadra. Así se construye una comunidad que va más allá de la adoración ciega y permite que los artistas, no solo crezcan en sus carreras, sino también como personas.

El Algoritmo Que Reemplazó a tus Amigos

Antes de que la música digital se convirtiera en lo que es hoy, las recomendaciones musicales solían llegar de boca de algún amigo o amiga, y sonaban más o menos así: ¿En serio no has oído lo nuevo de Fulano? ¿En qué planeta vives? ¡OMG! Te va a volar la cabeza… escucha…”.

Amigos Eran Los de Antes

Sin embargo, desde la aparición de las plataformas digitales, esos amigos fueron reemplazados por un algoritmo o fórmula, que intenta aprender lo más posible de ti (y de otra gente como tú), para recomendarte la canción perfecta.

Según dicen los expertos, esta alocada carrera de intentar conocerte mejor que tu propia madre, comenzó cuando Netflix desafió a desarrolladores de todo el mundo, con el llamado ‘Netflix Prize’, que ofrecía un millón de dólares a quien lograra crear la mejor herramienta de aprendizaje de los gustos de sus usuarios. 

Deep Learning

Esto ayudó a desarrollar una rama del negocio que antes no existía y de la cual nació, no solo la herramienta de Netflix, sino variaciones mejoradas que hoy llevan a cabo el llamado “Deep learning”, en el que se basan todas las compañías para intentar mantenerte conectado y pagando por sus servicios.  

Seguramente habrás notado que con el correr del tiempo, la puntería de estas empresas va mejorando y si te gusta, por ejemplo, Maluma, ya no te recomiendan a alguien como J Balvin, solo por ser ambos colombianos y cantar reggaetón, sino que entran en juego muchas otras variables.

Y es que, si bien apenas te inscribes, algunas empresas te hacen un pequeño cuestionario para conocer más de ti, a veces no es suficiente para saber con certeza si te gusta más Rosalía o Karol G, por lo que al inicio se basan mucho en demográficos como: tu edad, nacionalidad o idioma, datos que posteriormente van refinando a medida que comienzan a ‘conocerte’.

Ensalada de Datos

Luego de cierto tiempo, ese complicado algoritmo genera una ensalada de datos en la que combina no solo lo que tú y gente como tú consumen, sino también variables como el ritmo, la instrumentación y hasta las letras de cada canción que oyes. Cuando multiplicas eso por millones de usuarios, que dan ‘likes’ o agregan nuevas canciones a sus playlists, dicha ensalada se convierte en valiosísima información, que cada vez que te conectas, va reafirmándoles cuál es la música que realmente te gusta.

¿Y Los Nuevos?

Hasta aquí, ese sistema solo sirve para recomendarte artistas y canciones que la plataforma ya conoce y mantiene en rotación, pero cuando aparecen músicos nuevos o canciones a estrenar, al algoritmo no le queda más que realizar comparaciones entre músicos similares, géneros, ritmos, armonías e incluso frecuencias. Este incesante cruce de datos, permite recomendarte música o artistas nuevos y evitar así que las recomendaciones que te hagan, sean siempre las mismas.

Populares e Independientes

Para estas empresas, es casi tan importante presentarte música nueva como sugerirte los más grandes hits, ya que esto no solo ayuda a que valores más la aplicación como tal, sino que evita que te aburras de escuchar lo mismo. En otras palabras, cuando hablamos de artistas ‘desconocidos’, las plataformas intentan ser dos de tus amigos cercanos: El que te recomienda lo nuevo y súper popular de Bad Bunny, y el que te habla de una banda que escuchó en un restaurante chino durante el fin de semana.

Algún día no muy lejano, el sistema sabrá proponerte música, adaptada a la actividad que estés realizando en el momento, ya sea que estés en el gimnasio, en tu casa, o en el trabajo. 

Mientras tanto, no descuides a tus amigos, que si bien ya no los necesitas para que te recomienden música, nadie cuenta chistes tan malos como ellos, y eso… no podrán reemplazarlo con ningún algoritmo.

Qué Hacían Estos 8 Artistas Globales, Antes de Ser Famosos

Aunque ahora poseen joyas y relojes de increíble valor, viajan en lujosos aviones privados y se desplazan por las calles en autos diseñados para pistas de carrera, tus músicos favoritos tuvieron inicios comunes, compartiendo experiencias similares a las nuestras. Antes de acumular millones, eran personas corrientes, con trabajos normales, simplemente luchando por salir adelante..

Rauw Alejandro

Mucho antes de cantar en estadios ante decenas de miles de personas y conquistar a su ahora ex novia, Rosalía, Rauw trabajó de mesero y luego de cajero. Además, vendió ropa, trabajó en almacenes y hasta fue jardinero.

Cuenta que cuando comenzó a invertir en su proyecto como artista, llegó a tener tres trabajos a la vez.

Shakira

La señora Mebarak Ripoll, más conocida como Shakira, siempre tuvo claro que quería dedicarse a algo relacionado con las artes. Inicialmente, se aventuró en la actuación y llegó a protagonizar la telenovela “El Oasis” en 1994. En dicha producción, interpretaba el papel de la hija de un influyente terrateniente, enamorándose de un hombre perteneciente a una familia rival.   

Bad Bunny

Antes de alcanzar la fama como el artista más escuchado a nivel mundial, Benito Antonio Martínez Ocasio cursó algunas materias en la carrera de Comunicación Audiovisual de la Universidad de Puerto Rico. No obstante, su empleo consistía en orientar a los clientes sobre la ubicación del azúcar en las góndolas y empacar sus compras. Hasta el año 2016, desempeñaba estas funciones en la cadena de supermercados Econo en Puerto Rico.

J Balvin

José Álvaro Osorio Balvin descubrió su pasión por la música a una edad muy temprana. Mientras tejía su sueño de convertirse en un artista famoso, decidió mudarse a los Estados Unidos. Durante su tiempo en el país, tuvo trabajos poco convencionales, como pasear perros en la ciudad de Nueva York y pintar casas en Miami.

Debe resultar extraordinariamente gratificante para él ahora, al volante de alguno de sus auto deportivos, pasar frente a algunas de las propiedades en las que trabajó.

Wisin

Antes de formar el dúo de la historia junto a su amigo Yandel, Juan Luis Morera Luna se ganaba la vida como barbero / peluquero. Si bien ya desde adolescente descubrió que tenía una gran habilidad para rapear, la dura situación económica por la que pasaba su familia, lo llevó a tomar ese trabajo, al finalizar sus estudios secundarios. 

Nicky Jam

Tal parece que comenzar trabajando como empacador en un supermercado, puede ser buena idea para tu futuro, ya que además de Bad Bunny, Nick Rivera Caminero también tuvo ese trabajo, pero con tan solo 11 años de edad. 

Un día se puso a rapear mientras embolsaba el mercado de la gente, con la suerte de que una mujer, que trabajaba en una productora llamada MP Records, lo escuchó y gracias a ellas terminó siendo firmado para grabar su primer disco.

Don Omar

William Omar Landrón, comenzó a componer sus primeras canciones a los doce años, pero sus inicios musicales nada tuvieron que ver con lo que lo hizo famoso, ya que William dio sus primeros pasos en la música, trabajando durante cuatro años como pastor, en la Iglesia de la Restauración en Cristo en Bayamón, Puerto Rico.

Le tomó tres discos, llegar al lugar en el que quería estar y lo logró con Danza kuduro.

Maluma

Y por último, tenemos a Juan Luis Londoño Arias, quien creció con la convicción de que algún día sería un reconocido jugador de fútbol, ya que además de amar el deporte, ese era el sueño de su padre. El colombiano llegó a formar parte de los equipos del Atlético Nacional y Equidad Club Deportivo, pero a eso de los 16 años, fue la música la que terminó por seducirlo y estamos seguros sus fans, están más que contentos que así haya sido.

Keityn – El increíble compositor que el fútbol casi nos roba

Nacido en Cali, Colombia, su verdadero nombre es Kevyn Mauricio Cruz Moreno. Su sueño, desde siempre, era el de lograr ser futbolista profesional, no solo por gusto personal, sino para poder ayudar a su familia económicamente. Aunque ya le había tocado abandonar el colegio para trabajar, Kevyn quería una mejor vida para los suyos.

Sin embargo, previo a lograr notoriedad en ese deporte, los médicos identificaron en él la enfermedad de Perthes, una afección que ocasiona la ‘muerte’ del hueso. Esta enfermedad resulta de la interrupción del flujo sanguíneo en la zona donde la cabeza del fémur se une con la cadera.

Esto no solo le impedía cumplir con su sueño de ser futbolista, sino que los médicos hasta le exigieron que permaneciera casi sin caminar. No fue sino hasta la etapa de adolescente, que luego de una serie de tratamientos, logró librarse de dicha enfermedad y vivir una vida como la de cualquier otro niño de su edad.

Sin embargo, durante su período de inmovilidad, sus padres, que también son cantantes, le regalaron una guitarra con la intención de hacer sus días más llevaderos, sin siquiera imaginar que ese solo acto cambiaría sus vidas para siempre.

Con el correr del tiempo, Kevyn logró dominar el instrumento y comenzó a realizar sus propias composiciones, lo que en 2018 y ya con 22 años de edad, lo llevó a dar comienzo a su carrera musical.

Su primer éxito llegaría de la mano del tema ‘Culpables’, compuesto para su compatriota Manuel Turizo. De ahí en más llegaría una seguidilla de éxitos que fueron solidificando su nombre en la industria, colaborando en ‘Tusa’ de Karol G, ‘Qué calor’ de J Balvin, ‘Hawái’ de Maluma y Te Felicito‘ y ‘Monotonía de Shakira, entre muchos otros.

Todos esos éxitos le abrieron paso en la difícil carrera de ser compositor, hasta que la session #53 del productor argentino Bizarrap, junto a Shakira, terminaría por convertirlo en uno de los nombres de mayor peso en el mainstream actual.

“Hermano, qué gusto conocerte. Espero que este sea el primero de muchos hits que hagamos juntos. Estoy seguro de que así será. Sos una increíble persona y más increíble artista aún”, fueron las palabras del ‘Biza’, elogiando la tarea del colombiano.

Atrás quedaron los sueños de ganar dinero y premios como futbolista, los cuales fueron reemplazados por tres premios Grammy Latinos y el galardón de ser nombrado compositor del año en 2023, durante los Premios ASCAP (Asociación Estadounidense de Compositores, Autores y Editores) de la música latina.

Una prueba más de que a veces los obstáculos en nuestras vidas, aparecen para llevarnos al lugar al que verdaderamente pertenecemos o al que nos merecemos.

¡Felicitaciones Kevyn!

¡Encontramos a los culpables de que casi no haya Pop/Rock latino!

Por Gonzalo Noales

“Yo sé que a ti te gusta el pop/rock latino, pero es que el reguetón se te mete por los intestinos…”

Así cantaba Residente en 2005, y tenía razón. Poco a poco y casi sin darnos cuenta, el pop/rock latino desapareció del mainstream, de las listas más importantes de Billboard y consiguientemente… de nuestros oídos.

¿Hay alguien ahí?

Si no escuchas rock, te desconectas de las novedades del género, y al desconocer lo nuevo, dejas de consumirlo. Así fue como el mainstream se inclinó hacia la siguiente opción en la lista, adoptando sonidos representados por artistas como Juanes, Shakira o Maná, entre muchos otros. Esa fusión de pop/rock con matices autóctonos de sus respectivos países se convirtió en lo más “rockero” que resonaba en los medios.

¡Encantados, mucho gusto!

Este cambio llevó a que, inadvertidamente, los argentinos conocieran el vallenato, los colombianos escucharan rancheras y los mexicanos se entregaran a la música tropical. Se abrieron así nuestras mentes a sonidos internacionales que, de otra manera, tal vez nunca hubiéramos explorado.

De $20.00 a $1.00 ¿Hello?

No obstante, ocurrió algo más significativo: hasta ese momento, la música se adquiría físicamente. Un CD rondaba los $20.00 y pocos se aventuraban a hacer ese gasto en algo que no conocieran o realmente les gustara. Pero claro, eso fue hasta la llegada de la música digital, y con ella, la posibilidad de adquirir canciones individuales por tan solo $.99.

Este cambio de hábito musical, junto con la opción de comprar cualquier canción que nos gustara por menos de un dólar, nos permitió explorar una variedad infinitamente más amplia de sonidos nuevos.

¿Tú o tus padres lo hicieron?

Es probable que, en esa época, muchos seguidores o fanáticos del pop/rock hayan adquirido ‘La Gasolina’ o ‘Atreve te te’, de manera inocente para, por ejemplo, ambientar una fiesta. Y así, poco a poco y casi sin percatarse, comenzaron a cambiar su consumo de música a tal punto que artistas como Shakira, con el fin de mantenerse relevante, pasó de hacer esto:

A hacer algo como esto:

Y la verdad, bien por ella, porque entendió que para mantenerse en nuestras playlists, era necesario grabar ese trap con alguien como Maluma; de la misma manera que para Maluma, colaborar con una celebridad como Shakira era esencial para consolidar su carrera.

¿Dónde Está mi Gente?

Para ese entonces, la gente pedía música bailable y divertida, algo que los reguetoneros comprendieron desde el principio, incorporando ritmo, alegría y sensualidad a sus sonidos, ingredientes que prendieron al público como pólvora, llevándolos a perrear como si no hubiera un mañana.

La llegada de las plataformas digitales de suscripción mensual, sumadas a temas como: “Mi Gente” de Balvin, “Despacito” de Fonsi y Yankee, o “I Like it” de Cardi B, terminaron de sellar el trato, no solo con los hispanohablantes, sino con el planeta entero.

… En Otras Palabras.

El rock, tal y como muchos de nosotros lo conocimos, no desapareció, sino que evolucionó. La demanda da forma a la oferta y eso es lo que estamos experimentando hoy en día.

Por lo tanto, si la pregunta es ¿Quién hizo desaparecer al pop/rock del mainstream? La respuesta es sencilla: Tú, yo, nosotros… todos.

Lo más sobresaliente de los Grammy 2024

Esta edición de los premios Grammy fue una de las más interesantes en cuanto a diversidad de talento y a las increíbles actuaciones que pudimos presenciar. Pero comencemos por el principio:

La alfombra roja fue testigo de algunos de los diseños de ropa más espectaculares de la noche y de los que cuáles destacamos los de: Nicki Nicole, Olivia Rodrigo, Miley Cyrus y Taylor Swift.

Siempre es difícil pronosticar el éxito, o el fracaso de las parejas del espectáculo, pero debemos decir que vimos a Peso Pluma y a Nicki, verdaderamente enamorados y demostrándolo abiertamente…

El show, conducido por Trevor Noah, fue abierto por Dua Lipa, quien dio inicio a la 66ª entrega de los Premios con un popurrí de ‘Training Season’ y ‘Houdini’, los dos primeros sencillos de su próximo y tercer álbum de estudio.

Miley Cyrus, por su parte, dio también una de las actuaciones más renombradas de la noche, con su tema “Flowers”, por el que se hizo acreedora de su primer Grammy, poniendo a bailar a todos los presentes.

Karol G hizo historia al ser la primera mujer en ganar la estatuilla por Mejor Álbum de Música Urbana, diciendo: “Esto es algo hermoso, mi álbum me ha dado los mejores recuerdos, gracias. Les prometo que daré lo mejor de mí y será el primero de muchos”.

Otra de las actuaciones más sobresalientes vino de la mano de Billie Eilish, quien realizó una impecable versión de su tema ‘What was I made for’ de la película ‘Barbie’

SZA, posiblemente una de las artistas más talentosas del momento, se llevó a casa el premio a Mejo Canción de R&B, por su tema ‘Snooze’, diciendo: “Quiero agradecer a mi padre, a mi madre, a Dios, a mi familia. Vengo de muy lejos y no puedo creer que esto esté sucediendo. Estoy muy agradecida”

Además, la cantante realizó una representación casi teatral de su tema ‘Kill Bill’:

Aunque Taylor actuó sorprendida al escuchar su nombre en las diferentes categorías en las que ganó, ninguno de nosotros siquiera pestañeo, ya que era de esperarse que triunfara junto a su disco ‘Midnights’, y de hecho se hizo acreedora del premio a Mejor Álbum siendo la cuarta vez que lo consigue y logrando un récord en la historia de los Grammy.

Además, Swift aprovechó para anunciar la salida de su nuevo disco, titulado ‘The tortured poets department’ y que verá la luz en abril de este año.

Uno de los pasajes un tanto incómodos vino de parte de Jay Z, quien si bien recibió el premio a Global Impact Award, aprovechó el momento para quejarse del hecho de que su esposa Beyoncé nunca haya sido reconocida con el premio a Mejor Álbum. El reclamo pareció un tanto fuera de lugar, ya que la votación que decide los ganadores de cada nominación está realizada por cientos de miembros que votan sin necesariamente saber por quién están votando sus colegas.

Pero si tuviésemos que resaltar el momento más especial de la noche, sin duda sería la actuación de la legendaria cantante y compositora, Joni Mitchell, quien a sus 80 años y a pesar de haber llevado una carrera musical de un nivel excepcional durante más de 50 años, se presentó a cantar en estos premios por primera vez.

Una noche verdaderamente memorable en la que muchos de los nuestros fueron también reconocidos y cuyos nombres te listamos a continuación:

Best Latin Pop Album
La Cuarta Hoja, Pablo Alborán
Beautiful Humans, Vol. 1, AleMor
A Ciegas, Paula Arenas
La Neta, Pedro Capó
Don Juan, Maluma
GANADORA: X Mí (Vol. 1), Gaby Moreno

Best Música Urbana Album
SATURNO, Rauw Alejandro
GANADORA: MAÑANA SERÁ BONITO, Karol G
DATA, Tainy

Best Latin Rock or Alternative Album
MARTÍNEZ, Cabra
Leche De Tigre, Diamante Eléctrico
GANADOR (EMPATE): Vida Cotidiana, Juanes
GANADORA (EMPATE): De Todas Las Flores, Natalia Lafourcade
EADDA9223, Fito Páez

Best Música Mexicana Album (Including Tejano)
Bordado A Mano, Ana Bárbara
La Sánchez, Lila Downs
Motherflower, Flor De Toloache
Amor Como En Las Películas De Antes, Lupita Infante
GANADOR: GÉNESIS, Peso Pluma

Best Tropical Latin Album
Voy A Ti, Luis Figueroa
Niche Sinfónico, Grupo Niche y Orquesta Sinfónica Nacional de Colombia
VIDA, Omara Portuondo
MIMY & TONY, Tony Succar, Mimy Succar
Escalona Nunca Se Había Grabado Así, Carlos Vives
GANADOR: Siembra: 45o Aniversario (En Vivo en el Coliseo de Puerto Rico, 14 de Mayo 2022), Rubén Blades con Roberto Delgado & Orquesta

Best Latin Jazz Album
Quietude, Eliane Elias
My Heart Speaks, Ivan Lins with the Tblisi Symphony Orchestra
Vox Humana, Bobby Sanabria Multiverse Big Band
Cometa, Luciana Souza & Trio Corrente
GANADOR: El Arte Del Bolero Vol. 2, Miguel Zenón & Luis Perdomo

Best Global Music Performance
“Shadow Forces,” Arooj Aftab, Vijay Iyer & Shahzad Ismaily
“Alone,” Burna Boy
“FEEL,” Davido
“Milagro y Desastre,” Silvana Estrada
“Abundance in Millets,” Falu & Gaurav Shah (featuring PM Narendra Modi)
GANADOR: “Pashto,” Béla Fleck, Edgar Meyer & Zakir Hussain featuring Rakesh Chaurasia
“Todo Colores,” Ibrahim Maalouf featuring Cimafunk & Tank and the Bangas

Best Global Music Album
Epifanías, Susana Baca
History, Bokanté
I Told Them…, Burna Boy
Timeless, Davido
GANADOR: This Moment, Shakti

Best Children’s Music Album
Ahhhhh!, Andrew & Polly
Ancestars, Pierce Freelon & Nnenna Freelon
Hip Hope For Kids!, DJ Willy Wow!
Taste the Sky, Uncle Jumbo
GANADOR: We Grow Together Preschool Songs, 123 Andrés

Best Orchestral Performance
GANADOR: “Adès: Dante,” Gustavo Dudamel, conductor (Los Angeles Philharmonic)
“Bartók: Concerto for Orchestra; Four Pieces,” Karina Canellakis, conductor (Netherlands Radio Philharmonic Orchestra)
“Price: Symphony No. 4; Dawson: Negro Folk Symphony,” Yannick Nézet-Séguin, conductor (The Philadelphia Orchestra)
“Scriabin: Symphony No. 2; The Poem of Ecstasy,” JoAnn Falletta, conductor (Buffalo Philharmonic Orchestra)
“Stravinsky: The Rite of Spring,” Esa-Pekka Salonen, conductor (San Francisco Symphony)

¿País latino con mayor crecimiento musical?

Por Gonzalo Noales

Explorando el panorama latino, nos adentramos en un fenómeno que ha transformado las dinámicas de la industria. Mientras ciertos países han sido protagonistas indiscutibles, hay uno que emerge como el epicentro del crecimiento musical.

No es Puerto Rico

Desde el auge de la música urbana, Puerto Rico ha dominado la industria musical casi por completo. Aunque en algunos momentos Colombia logró seguirlos de cerca, el reinado de la pequeña isla caribeña nunca se vio realmente amenazado. De hecho, podríamos decir que el trono tiene la bandera boricua grabada para siempre, ya que fueron ellos quienes crearon la fórmula ganadora.

No es México

En los últimos años, hemos visto a la música regional mexicana establecerse firmemente en la industria y avanzar con paso seguro. Sin embargo, y aunque su crecimiento es innegable, sería injusto colocarlos en el primer puesto de los países con mayor crecimiento, ya que como sugiere su nombre, se trata de música regional —mexicana— y, por lo tanto, resulta obvio que sean ellos quienes obtengan el mayor beneficio.

Es Argentina

Así es, el país sudamericano fue dueño indiscutible del rock en nuestro idioma durante muchas décadas, siendo pioneros en la creación e internacionalización de este género. Sin embargo, con la llegada de la música urbana, al igual que en muchos otros países, el rock perdió gran parte de su popularidad.

Como resultado, Argentina dejó de exportar música y artistas durante muchos años, centrándose en crear y sonar dentro de sus fronteras. No obstante, con el surgimiento de nuevas generaciones influenciadas por el hip-hop y el rap anglosajón, sumado al éxito de la música urbana en español, comenzó a expandir sus horizontes.

Provenientes de las batallas de rap del Quinto Escalón en la década de 2010, artistas como Duki, Trueno, Lit Killah y Paco Amoroso no solo conquistaron una audiencia, sino que también dieron forma a una próspera escena. Al mismo tiempo, productores como Bizarrap y Federico Lauría crearon plataformas para que estos artistas encontraran canales de promoción a través de colaboraciones. En 2018, Lauría fundó Dale Play Récords, generando un giro de 360 grados en la escena musical argentina.

Desde entonces, el país del sur ha sido el mayor semillero de artistas nuevos exitosos que, dentro del género urbano y pop-urbano, han logrado imprimir su propio sello de autenticidad en lo que hacen.

Además de los mencionados anteriormente, artistas femeninas como Nicki Nicole, Nathy Peluso, María Becerra, Tini y Emilia, han roto viejas ataduras machistas y se han asociado a sus pares masculinos como Tiago Pzk, Paulo Londra, Khea y más recientemente, MIlo J, logrando reinventar el panorama musical latino, no solo en Latinoamérica sino también en los Estados Unidos.

Según un estudio realizado por Chartmetric, el top 10 de artistas argentinos pertenece al género Latino/urbano, alcanzando una audiencia internacional que oscila entre los 16 y los 25 millones de oyentes mensuales en Spotify, posicionándose en el top 500 de artistas globales.

¿Cómo lo lograron?

Una clave fundamental ha sido la asociación y colaboración orgánica con sus colegas. ¿Por qué la llamamos orgánica? Porque cualquiera que siga a estos artistas habrá notado que, en la mayoría de los casos, los une una verdadera relación de amistad, y que sus colaboraciones son mucho más que simples acuerdos comerciales.

Claro que nada de esto es casual; la química se tiene o no se tiene y no puede ser forzada. En el caso de ellos, podemos atestiguar que la tienen y de sobra.

La incógnita que queda en el aire es si podrán prolongar y sostener esta energía positiva con las nuevas generaciones de colegas, lo cual está aún por verse, pero mientras tanto, todo pareciera indicar, que no hay nada que los detenga.

¿Es la Inteligencia Artificial, Una Verdadera Amenaza Para Los Músicos y Artistas en General?

El término “inteligencia artificial” suele sonar contradictorio para muchos de nosotros, ya que una máquina no puede ser inteligente. Si analizamos esto en un sentido filosófico, esto es virtualmente imposible, por el hecho de que la máquina solo puede ser tan inteligente como las personas que la alimentan. Al menos hasta ahora, la IA carece de libre albedrío, ni la capacidad de evaluar algo según su propio gusto y no tiene conciencia propia.

Más allá de esto, la inteligencia artificial se ha convertido en una herramienta cada vez más popular en la industria del arte, y aunque la tecnología tiene el potencial de revolucionar el proceso creativo, también plantea una amenaza potencial para los artistas humanos. En este artículo, examinaremos el papel que la IA está desempeñando en el mundo del arte y exploraremos si existe una posibilidad real de que la IA se convierta en una amenaza para los artistas.

La IA y la creatividad

La IA ha estado presente en la industria del arte durante algunos años. Los algoritmos de aprendizaje automático pueden analizar grandes cantidades de datos y aprender patrones, lo que les permite crear obras de arte en una variedad de medios, incluyendo música, literatura, pintura y más. En algunos casos, los resultados son sorprendentes. La IA ha creado música que suena como si fuera compuesta por humanos, ha escrito cuentos que han sido publicados en periódicos y ha pintado cuadros que se han vendido por impresionantes cifras en subastas.

Un claro ejemplo en la música, es por ejemplo el tema que enfureció a Bad Bunny, creado utilizando AI y que se hizo viral algunas semanas atrás. ¿Si esta canción te gusta, ¿hasta qué punto importa o no, que la haya compuesto e interpretado una máquina?

Sin embargo, algunos críticos sostienen que la IA no es realmente creativa. Argumentan que simplemente sigue los patrones que ha aprendido de los datos que se le han proporcionado. Por ejemplo, una IA programada para crear reguetón, solo podrá crear eso.

La amenaza de la IA para los artistas humanos

Entonces, ¿existe la verdadera posibilidad de que se convierta en una amenaza? En un nivel superficial, podría parecer que la respuesta es sí. Si la IA puede crear obras de arte que son indistinguibles de las creadas por humanos, ¿por qué necesitaríamos a los humanos para crearlas?

Sin embargo, la realidad es que la IA no puede reemplazar a los artistas humanos, no puede replicar la singularidad de la experiencia humana, lo que significa que no puede capturar la complejidad de las emociones y los matices de la vida real. Además, la IA no tiene la capacidad de experimentar el mundo de la misma manera que los humanos. La creatividad humana se basa en la emoción, la intuición, la pasión y la conexión con el mundo natural que simplemente no pueden ser replicados.

Además, el proceso creativo no se trata solo del resultado final. Se trata del proceso de creación en sí mismo, que es una experiencia humana única y enriquecedora. Los artistas se inspiran en el mundo que les rodea, exploran nuevas ideas y perspectivas, y experimentan con diferentes técnicas y materiales. Es este proceso creativo el que alimenta la imaginación humana y produce obras de arte únicas y significativas.

Los creadores de esta increíble tecnología han intentado analizar y recrear el estilo individual de músicos o bandas. Sin ir más lejos, los científicos del Laboratorio de Investigación de SONY, fueron quienes crearon algunas de las primeras canciones completamente escritas por IA, como el tema, “Daddy’s Car”, intentando imitar a Los Beatles.

El papel de la IA en el proceso creativo

A pesar de que la IA no puede reemplazar a los artistas humanos, todavía puede desempeñar un papel importante en el proceso creativo. Puede ser una herramienta valiosa para los artistas, ya que puede ayudar a generar nuevas ideas, explorar diferentes técnicas y materiales, y mejorar la eficiencia del proceso creativo, permitiéndoles llegar a audiencias más amplias y diversificadas.

Mientras tanto, habrá que ver qué nos depara el futuro, no solo a músicos y artistas de todo tipo, sino a la gente común como tú o nosotros, que no seremos tan rápidos como esas máquinas, pero que sentimos e imaginamos cosas que, al menos por ahora, parecieran ser intocables para ellas.